Presentación

Si un niño/a experimenta numerosas muestras y situaciones de estimulación emocional podrá disponer en el futuro de reacciones adecuadas ante las situaciones que se le presenten en la vida, le resultará fácil ver los aspectos positivos de los acontecimientos y podrá comprender a los demás.
La primera y más influyente fuente de imitación de patrones emocionales es la propia familia del niño. Los padres son los mejores modelos para sus hijos. Uno de los mejores regalos que les puedes dar es la capacidad de saber animarse, de saber regular sus emociones y afrontar la vida sintiéndose bien consigo mismo. Sentirse bien, como cualquier otra habilidad requiere práctica y un continuo aprendizaje de técnicas y estrategias de autogestión emocional.

 

 

Si el ambiente es propicio y tolerante los niños expresan espontáneamente sus emociones, si esto no ocurre las esconderán o disfrazarán de forma que sus sentimientos serán el gran enigma a descubrir por sus padres.


Todos los niños expresan sus emociones de forma distinta y ello depende básicamente de los vínculos que tengan con sus padres y las estimulaciones que haya recibido de ellos, la familia y el ambiente que le rodea

LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL CONTEXTO FAMILIAR

 
La personalidad se desarrolla a raíz del proceso de socialización, en la que el niño asimila las actitudes, valores y costumbres de la sociedad. Y serán los padres los encargados principalmente de contribuir en esta labor, a través de su amor y cuidados, de la figura de identificación que son para los niños (son agentes activos de socialización). Es decir, la vida familiar será la primera escuela de aprendizaje emocional.


TRES ESTILOS INADECUADOS POR PARTE DE LOS PADRES:
Ignorar completamente los sentimientos de su hijo, pensando que los problemas de sus hijos son triviales y absurdos.
– El estilo laissez-faire. En este caso, los padres sí se dan cuenta de los sentimientos de sus hijos, pero no le dan soluciones emocionales alternativas, y piensan que cualquier forma de manejar esas emociones “inadecuadas”, es correcta (por ejemplo, pegándoles)
Menospreciar o no respetar los sentimientos del niño (por ejemplo, prohibiéndole al niño que se enoje, ser severos si se irritan…)
RASGOS CARACTERÍSTICOS DE LAS EMOCIONES EN LOS NIÑOS/AS:
Son intensas: los niños pequeños responden con la misma intensidad a un evento trivial que a una situación grave.
Aparecen frecuentemente: los niños presentan emociones frecuentes, conforme al incremento de su edad y descubren que las explosiones emocionales provocan desaprobación o castigos de los adultos.
Son transitorias: el paso rápido de los niños de las lágrimas a la risa, de los celos al cariño,
Las respuestas reflejan individualidad: En todos los recién nacidos es similar, pero gradualmente se dejan sentir las influencias del aprendizaje.
Cambios en la intensidad de emociones: a ciertas edades hay emociones intensas que se desvanecen con la maduración y en cambio otras comienzan a cobrar protagonismo. (miedo necesidad de la presencia del adulto de referencia, reafirmación de su individualidad….)
Se pueden detectar mediante señales conductuales: puede ser que no sepan, no puedan o no quieran mostrar sus emociones directamente, pero lo hacen de forma indirecta a través de la inquietud, el llanto, fantasías, dificultades en el habla, irritación, silencios…

En la actualidad se acepta que pueda haber diferencias genéticas en la emotividad más las evidencias señalan a las condiciones ambientales como las principales responsables de de las diferencias de emotividad de los recién nacidos.

CONDICIONES DE LAS QUE DEPENDE EL DESARROLLO EMOCIONAL:
– La maduración: el desarrollo intelectual que permita una mayor capacidad par percibir los significados de las vivencias. El desarrollo de la imaginación, la comprensión, la memoria y anticipación de situaciones
-El aprendizaje: Las emociones y su manifestación se pueden aprender de formas distintas:
– Ensayo- Error: aprenden a responder a las emociones en función de la satisfacción que les produce.
Imitación: observan qué cosas producen reacciones a otros niños o familiares
-Condicionamiento: aprenden por asociación. Los objetos y situaciones que en un principio no provocan reacciones emocionales lo hacen más adelante como fruto de la asociación.
-Adiestramiento: aprendizaje con orientación y supervisión se centra en el tipo de respuesta ante la emoción. Se les enseña el modo adecuado de respuesta.
AUTORREGULACIÓN DE LAS EMOCIONES EN LA INFANCIA:
SER consciente de las emociones que experimenta el niño.
VER en esa emoción la oportunidad de transmitir intimidad y aprendizaje.
ESCUCHAR con empatía y dar importancia a los sentimientos del niño.
AYUDAR A EXPRESAR verbalmente las emociones, poniéndoles un nombre adecuado: pena, susto, sorpresa, alegría, enfado, tristeza…
AYUDAR A BUSCAR SOLUCIONES. Evitar el dar soluciones hechas al niño.



Noelia Moreno Huerta
Col. Nº R- 00317